Francisco Magallón - FOTOGRAFÍA DE VIAJE

Trabajadoras del sexo y sus hijos: Faridpur (distrito histórico en el centro de Bangladesh, División de Dhaka), vive una población de más de 2 millones de personas.

En sus 4 grandes burdeles, la situación de las mujeres que se prostituyen es alarmante. Hasta hace poco tenían que ir descalzas para ser reconocidas ya que su actividad esta “prohibida” en este país musulman, no tenían acceso a bancos ni derecho a un enterramiento digno.

Solo en el centro de la ciudad, junto al mercado principal, trabajan más de 400 prostitutas, y en las afueras, en otro cercano, 500. Más de la mitad de ellas no llegan a los 16 años

En los reducidos espacios donde viven con sus hijos o en indescriptibles habitaciones, cobran una media de 50 takas por cliente, el equivalente a menos de medio euro. Muchas de ellas llegan a Faridpur desde las áreas rurales víctimas de las mafias de tráfico humano. En otras ocasiones, abandonan las áreas afectadas por desastres naturales en busca de un mejor futuro en las ciudades. Cuando llegan se encuentran con una deuda que les obliga a prostituirse. Algunas de ellas, nacidas allí, no conocen otro mundo diferente.